EL COLLAR DE LA PALOMA




Obrad como si no me hubierais conocido nunca, que yo también obraré como si no me hubieseis conocido ni amado.


domingo, 18 de mayo de 2008

Vivo en la carretera

Terminado el puente y ya de regreso a la Capital del Reino, os pongo unas cuantas preguntas que me hago mientras conducía "la cochecita":

  1. ¿Es posible seguir creyendo con diez años en el Ratoncito Pérez?
  2. Si yo no llego, ¿mi blog seguirá dando vueltas eternamente sin que lo hagan desaparecer?
  3. ¿Es absolutamente necesario que yo vaya a trabajar mañana?
  4. ¿Me habrá hecho alguien la cama que la dejé sin hacer cuando me fui de puente?
  5. ¿Mi orquídea salvaje habrá abierto los capullos que tenía cerrados cuando me fui?
  6. ¿Hacienda me hará el ingreso de devolución esta semana o tendré que esperar 200 años más?
  7. Si me compro una gata persa, como tengo previsto, ¿aguantaría cuatro días de puente sin comer?
  8. ¿A quién le dejaré en herencia mis libros sagrados?
  9. ¿Ese tío se ha saltado un stop o es que yo veo doble?
  10. ¿No sería posible ponerle ascensor a un tercer piso sin ascensor?

Encantada de estar aquí y saludos cordiales.

6 comentarios:

Paul Spleen dijo...

¿Dónde ha tenido usted a bien pasar el puente? Tranquila, ya no hay fotógrafos atentos…

Si un sobrino de 10 años te dice algo del ratoncito Pérez…, lo que quiere es vil metal, claro. Propongo darle un puñetazo en el maxilar superior y soltarle 2 euros por cada diente que caiga.

Ángel dijo...

La respuesta a todas sus preguntas es la misma, pero aún no sé cuál.

Dame un par de minutos o, por el contrario, de años.

Alejandra dijo...

No se fíe, Paul. Yo sufro el síndrome de Telma Ortiz y no puedo hacer declaraciones tan alegremente. Eso sí, le puedo adelantar que las vistas que yo he tenido han sido bastante más tristes que las suyas, a tenor de lo que publica en su blog.

Lo del Ratón: Me contaban que una madre trataba de contarle a su hijo que el ratoncito Pérez no existía. Le dijo algo así como: El Ratón soy yo. Y el niño, respondió: ¿Entonces eres tú quién recoge los dientes de todos los niños del mundo?.

Yo creo que algo falla, pero me dicen los expertos que sí es posible.

Yo, desconfío.

Alejandra dijo...

Pues debería darse prisa en encontrar la respuesta, Ángel, porque vivo sin vivir en mí. Tómese su tiempo. ¿Con cien años cree que tendrá las respuestas?.
Aquí le espero.

Dr. Durden dijo...

Es gracioso. Cuando eres pequeño, te dan dinero por tus dientes, y de mayor, devuelves ese dinero (con intereses) para recuperarlos.

No trabaje usted mañana.
No es absolutamente necesario.

Alejandra dijo...

Intentaré seguir ese consejo que tan amablemente me envía desde ¿Ciudad Real?.
Espero que mis superiores opinen lo mismo.
Cuídese todo (incluídos los dientes).