Pues bien. Ahora ya estamos en capilla. Veinticuatro horitas y nos vamos. Por si acaso, hoy he compartido con dos amigas un arroz marinero. He estado a punto de morir de gusto.
No podía contener tanta alegría ni tanto placer.
Y así de felices nos vamos con la música a otra parte.
Cuidaos todos. Nos vemos pronto.
5 comentarios:
Haga usted honor al nombre de Hebrón y granjéese muchas amistades por allí. Pienso en la comida y me da usted mucha envidia. Suerte.
Lo cierto y verdad es que mañana me pienso pedir un par de platillos de aquellos que una no encuentra cocinados aquí por mucho que acuda a los sitios que dicen hacerlos. Más tarde o más temprano, yo me quedaré en tierra y le tocará a usted degustar platillos en aquella latitud.
A escasos sesenta minutos de coger el taxi para la T-1, y una vez más, le agradezco sus mensajes y sus buenos deseos.
Se merece una buena crónica que no sé si estaré en disposición de ir haciendo o de hacerla a la vuelta. Pero lo intentaré. Como gesto de buena voluntad, acabo de meter la cámara de fotografías en la maleta. Cosa que jamás he hecho en mi vida. Pero desde que tengo blog, soy muy otra.
Un beso.
nos tienes a todos expectantes con este viaje en el que ha habido mas preparativos de los habituales, que si cremalleras a prueba de manos largas, que si camara de fotos... y ya por ponernos los dientes largos nos hablas de suculentos manjares que tienes la determinacion de saborear... toma nota de todo, sobre todo de lo que no se puede poner en el blog y ya nos haras saber... cuidate muchisimo. espero que llegue
Bueno como yo ya sé que has llegado: me alego que ya estés allí!!!
Paz hermana!!!!
Cuidate y nos vemos a la vuelta.
Besetes guapa.
PD: a qúe es guapa la peke???
Cuando vuelves?
Besetes
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