EL COLLAR DE LA PALOMA




Obrad como si no me hubierais conocido nunca, que yo también obraré como si no me hubieseis conocido ni amado.


jueves, 10 de julio de 2008

Para abrir boca

Pues sí, voy haciendo ya boca y me cuelgo aquí una antigua foto de un restaurante de Jerusalén que ya visitamos en su momento. Y así ya voy salivando un poco hasta el domingo próximo que me prometo a mí misma una serie de platillos que echo de menos.
Por tener, ya tengo la maleta abierta y voy metiendo cosas. Pasaporte listo, billete listo. Incluso tengo hotel, programa de viaje y toda la orquesta logística acompañando.
Podría decirse que si el vuelo saliera esta misma noche, no me faltaría nada en el ajuar. Pero no, aún toca esperar hasta las 23:55 del sábado. Hora torera donde las haya. Al menos, eso sí, me permite aprovechar el día entero en Madrid.
Podeis venir a despedirme siempre y cuando, se haga con clarines y zambombas. Si no vais a hacer ruido, se puede hacer discretamente poniendo aquí un mensaje. O un teléfono. O un correo. O un pensamiento. Que, desde que soy bruja, eso también lo noto.
Ahora mismo, Pepe acaba de despedirme. Con toda su agonía a cuestas.

(Como estoy romántica hoy y muy sensible, también admito besos. Con algo de saliva. El exilio me pone tierna, me lo tengo que hacer mirar).

4 comentarios:

Paul Spleen dijo...

Como Cicerón en su exilio en Tesalónica le contaba por carta a su amigo Ático la angustia vital que le producía verse expulsado de la corrupta Roma, use usted este blog para lo mismo, aunque espero que vaya bien pertrechada de cámaras y cálamos para hacer crónicas con relativa asiduidad.

Besos y páselo usted bien.

Alejandra dijo...

Por ahora, he investigado ya la conexión a Internet en el hotel. La tenemos.
A la cámara no termino de ser adicta, de hecho, la foto que aquí aparece es resultado de un primer arrebato digital de hace dos años que en pocas ocasiones se ha vuelto a repetir.
Iré contando, estimado Paul. Al menos, sé que es usted fiel a la crónica.
Un beso (esto lo pongo yo cuando estoy como hoy. Sabrán valorarlo en su grandeza).

Marta dijo...

Y digo yo... A ti te hacen descuento en el abono transporte, verdad? Yo de mayor quiero ser como tú. Así de país en país y a todo trapo... Joder, si me he ido cinco días a Roma y hasta estar allí no estaba segura de que el hotel existiera!
Eso sí, gracias a la improvisación y a ir con una amiga que está algo peor que yo de la cabeza, pues mira chica, hemos conocido al médico de Su Santidad el Bene (es que ya es casi de la familia) aunque esta historia te la reservo para cuando tengas vacaciones de lunes a viernes con una cena en el chino, que nos podemos reir estrepitosamente (la risa está asegurada, por si hay alguno con buen sentido del humor y mejores intenciones que se quiera apuntar)
Yo puedo ir a despedirte, de hecho me viene muy bien porque no tengo claro qué hacer con mis locos este sábado, a´si que lo puedo plantear como actividad del día. Y por el ruido no te preocupes, tengo una niña que en las aglomeraciones le da por rajarse de arriba a abajo y si le dejas una percha mete la cabeza y se cuelga del primer clavo que vea, así que escándalo te pueden montar. es probable que también te retiren el pasaporte, pero total, a ti lo que te preocupa y debes tener siempre a salvo es el abono transporte, no?
Bueno amiga, que me das mucha envidia! Que si puedes te traigas unos litros de agua del Jordán que el día del bautizo, comprobamos que es la única forma de tener a mi pequeña sobrina callada, tirarle agua del Jordán por el melón. Y si no, pues chica con que vuelvas tú, la verdad, yo me conformo!
Cuidao con los rabinos... Enorgullecerte de ser eso no suena nada bien... Rabino... Qué cosa más rara... Rabino... Eso sí, si le pones un palotroque a la n y la conviertes en una ñ... cuidado! Estás ante un brasilero digno de observar con cautela. (Si te lo has de encontrar, al rabiño, no al rabino, traelo que lo inspeccionemos!)
Pásalo bien suertuda! Y reserva un día de diario de tus vacaciones (si las tuvieras o tuvieses) para que te cuente lo del médico del Papa... O lo del señor que nos sacó una navaja en un callejón de la Fontana de Trevi a las tres de la tarde con cienes y cienes de turistas, o como pudimos perder la vida esperando un bus nocturno en lo más oscuroncio de Roma, o como un carabinieri me echo de una fuente, o por qué casi nos pega una monja croata... Esas cosas por las que mi madre me tiene escondido el pasaporte... Por aquello de que dentro de la Unión Europea aún es fácil recuperarme, pero fuera...
Pisa Tierra Santa y pisa fuerte que paga el ayuntamiento de allí y me han dicho que todavía no les ha llegado la crisis económica y la religiosa la tienen muy trabajada y la recalificación de terrenos te la tiene que aprobar una palomeja que no se deja ver desde hace dos mil años...
(lo de rabino me sigue sonando fatal)

Alejandra dijo...

Mi querida Marta:

Te desscuelgas o cuelgas poco por aquí pero cuando lo haces, sube el pan.
Para tu gozo y espanto, te digo que me voy a entrevistar con un grupo de rabinos. Sin eñe. Que por ahora, lo mío no son las orgías. El caso es que es una de las cosas que me tienen que suceder en breve. A mí los rabinos me fascinan, me estimulan, me enternecen.
Daré parte, no de todo lo que suceda porque no podré, pero sí de lo esencial.
Y no te vayas a pensar que yo tengo menos locos que tú. Los míos son peores. Ni se cuelgan de perchas ni se comen clavos. Digo peores porque tienen apariencias bonachonas. Pero a la que te descuidas te meten la percha por el esternón.
Que digo que sí, que nos vemos pronto, con un café de por medio. Del chino me habrás de excusar que últimamente tengo objeción de conciencia con los rollitos de primavera.
Un beso grande.