EL COLLAR DE LA PALOMA




Obrad como si no me hubierais conocido nunca, que yo también obraré como si no me hubieseis conocido ni amado.


martes, 12 de agosto de 2008

Madrid, Madrid, Madrid...

Mañana acompañamos al Patriarca a la Capital del Reino para su consulta médica. Como últimamente está de moda entre mis amistades, quedarse tirados en mitad de la autovía y llamar para contarlo sobre las dos y media de la madrugada y aunque espero no correr la misma suerte, pondré un mensaje para notificar cualquier incidencia en el camino. En la última ocasión, me encontré un burro despistado que circulaba en dirección contraria y no lo conté. También con un número inmenso de asnos con permiso de conducir que circulan como les da la gana. Me encontré también con la Guardia Civil (pero eso es otra historia).
Por si queda alguna duda, sigo de vacaciones.
Mi breve paso por la capital del reino será breve, como ya se indicó. La cosa durará pocas horas y cuando termine, volveré a mi retiro espiritual para lo que me queda. Aprovecho para decir que incluso las noches empiezan a ser fresquitas. No cambio esto por nada. En todo caso, venid a verme.
Besos.

5 comentarios:

Paul Spleen dijo...

No me gusta nada este blog, oiga, y no me gusta nada la lista que ha puesto usted de cosas que no comparte con sus coetáneos.

¿Ha conocido usted a Darwish? Yo tuve de profesora a Luz Gómez, traductora de El fénix mortal o لماذا تركتَ الحصان وحيدا؟

Oficial y formalmente, me declaro lego en la materia. Ánimos para el patriarca.

Paul Spleen dijo...

Por cierto, ¿la capital de China ya no es Pekín? ;o)

Alejandra dijo...

Lo mío, estimado Paul, más que conocerlos en vida es asistir a sus funerales. Nunca llego a tiempo. Aquí donde me ve, estuve en el de Nizar Qabbani, en el de Hafez Al-Asad, en el de Saadla Wannus. Esos en directo. Y luego tengo la virtud de llegar y que suceda algo. Y si yo dejo alguno vivo, los remata una amiga mía que pisa el país y se muere el rey de turno o el monarca en cuestión.
Así que no, a Darwish no le he conocido personalmente. A quien sí conozco es a su antigua profesora. Desde hace unos diez años.
Y la capital de China es Pekín hasta que no la traslademos a Vallecas. Pero a mi blog le da mucho "glamour" poner Beijing. Me suena como mucho más chino y rebota mucho más al final.
La lista de cosas es producto de un análisis muy concienzudo. Me llevó siete noches de terraza y unas risas que ni le cuento. El método no era muy científico pero es que me fallaba también la materia prima.

¿Usted no estaba en Grecia?

Paul Spleen dijo...

No, mujer, yo no estaba en Grecia. Yo estaba dando envidia, creando expectación con mi viaje a Grecia, que es el 21. Eso sí, como puede usted comprobar, la cosa no se queda en Grecia… ;o)

Por lo que respecta a su gafe personal, me lo creo. ¿No dijo usted que hace poco estuvo en Mauritania? Cosas veredes…

Alejandra dijo...

Sí, ya he visto que amplía la información sobre su viaje, cosa que me parece de muy mal gusto (le remito a mi entrada del día uno de agosto) y lo digo por si luego se pone lloroso.

Lo de Mauritania es un ejemplo de lo que contábamos arriba. Aunque, insisto, si quiere un golpe de estado a tiempo, no tenemos más que llamar a mi amiga que ha enterrado a dos monarcas y tiene algún terremoto en su haber.

Seguiré atenta las narraciones previas a su viaje (no va a dejar nada para contar cuando vuelva).