Ya estoy en casa. Esta mañana me desperté en Rabat con vientos huracanados de componente oeste. Hice el trabajo y terminé mis faenas. Tuve tiempo de ver a las amistades. Todos los taxistas patrios y no patrios resultaron ser amables y considerados. El hotel estaba limpio. La cadena del váter funcionaba perfectamente. La ducha también. Había agua caliente. El personal del hotel era simpático. Los aviones salieron y volvieron con puntualidad. Las maletas no se perdieron. No me he caído al suelo, no me he roto nada, no tengo cagalera, ni gripe ni fiebre. Sólo he gastado veinte euros en cuatro días.
Además de todo esto, estoy de buen humor.
¿Se puede pedir más?.
4 comentarios:
Sí, que vuelvas pronto :(
Y acompañada!!!! Caray!!!!
Ah!!! Y que llames, que ayer te llamé yo y no estabas en tu casita todabía...
Besetes a las 2
Que te toque el Euromillones, pero ni sé si te dará tiempo a echar el boleto.
Compañeras y, sin embargo, amigas, que era una pregunta retórica sin más afán que confirmarme a mí misma lo feliz que me sentía en la noche de ayer con la obligación cumplida, un pan debajo del brazo y sin llagas en la lengua.
Pero puestos a contestar que sí, que vuelva pronto, querida Mónica y sí, que sea en tu compañía, querida anónima (por más que me des malos ratos) y sí, que me toque el euromillones, que ya lo echo en la T-4, si hace falta.
Jesús, mira que me haceis trabajar entre todas.
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