Pues sí, eso es lo que yo veía en mi cama beirutí cuando me acostaba. Os traigo aquí el siga la flecha a La Meca para desorientados, despistados e incrédulos de todo pelaje.
Hoy, sábado, empiezo a recuperar fuerzas después de los últimos viajes de Gulliver. Creo, incluso, que me dará la tarde-noche de hoy para hacer algo de vida social. O no, ya se verá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario