Acabo de llegar a la escalofriante cifra de dieciocho seguidores formales registrados lo que supone que se puede decir que soy mayor de edad en seguimiento.
Os envío un saludo desde la tierra de mis ancestros donde he pasado el fin de semana. La cosa se termina. Bien está lo que bien acaba. Pero me da una pereza enorme tener que hacerme ahora unos cuantos kilómetros. Bien me quedaría aquí tres meses, escondida, con los teléfonos apagados y con la conexión a Internet, para dejar señales de vida y piedrecitas por el camino para que se sepa por dónde voy.
Pero no puede ser. Así que vuelvo a la rutina, a la vorágine de la gran ciudad y a tener mucha actividad sexual. Que, como bien sabéis, consiste en hacer básicamente lo que me jode.
4 comentarios:
Pues habrá que celebrarlo, ¿no? ¡Felicidades!
Espero que no te refieras a lo de la actividad sexual, Samotracia. Sí, celebremos, por celebrar que no quede nada.
Un abrazo y gracias.
Jaja, me refería a la mayoría de edad, aunque me reí mucho con lo de la actividad sexual.
Ni te cuento la risa que me entró a mí el lunes cuando activé esa faceta de mi vida.
Un abrazo.
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